A día de hoy parece una idea rara que un ilusionado emprendedor o que un ciudadano en dificultades pueda acudir a una entidad financiera a solicitar un crédito y que acabe firmando un documento en el que consta que al susodicho se le prestan “x” bitcoins, cardanos o xrp para acceder al mismo, pero visto todo el camino que llevan recorrido las criptomonedas ¿quién sabe si se acabarán generalizando? En cualquier caso, lo que sí es cierto es que este tipo de préstamos en criptomonedas ya están empezando a hacerse un hueco, al menos en ciertos países y con sus particulares condiciones.
Préstamos en criptomonedas
Un ejemplo de cómo los créditos en criptomonedas están abriéndose camino poco a poco lo tenemos en España, país en el que ya se pueden solicitar préstamos en varias criptomonedas… con algunas peculiaridades.
Lo primero que se debe tener en cuenta es que los créditos ya están preaprobados, ¿qué es esto de los créditos preaprobados? pues exactamente lo que parece, que el crédito se encuentra aprobado aún antes de que el cliente lo solicite, se estudia la solvencia y las supuestas necesidades de los clientes y se les ofrece un crédito de una determinada cantidad, bien por una llamada telefónica, bien por un mensaje telefónico o directamente desde la app de la entidad financiera se puede aceptar el dinero -o las criptomonedas- con unos pocos clics y sin apenas papeleo.
En España la plataforma que ofrece estos créditos preaprobados es BitBase, el crédito deberá oscilar entre los 500 y los 100.000 euros, tendrá un interés mensual del 1 por ciento y una comisión de apertura del 3 por ciento y podrá pedirse en multitud de criptomonedas, y por supuesto en las más populares.
Para formalizar el préstamo parece que será necesario poco más que rellenar un formulario Know Your Customer como los que utilizan multitud de empresas del sector financiero. Los préstamos en criptomonedas parecen estar ganando popularidad en todo el mundo pero no sin controversia, ya que mientras para unos analistas es una forma ideal de bancarizar a los desbancarizados para otros todavía supondría un riesgo demasiado alto. Habrá que vigilar muy de cerca cómo evoluciona la bitcoinización del Salvador de Bukele para ver cómo funciona el uso de criptomonedas para integrar a toda la ciudadanía desplazada del sistema financiero.
Utilizar criptomonedas sin pedirlas prestadas ni comprarlas
Pero no siempre es necesario pedir o pagar por criptomonedas para poder operar con ellas, ya que mediante un bróker online se puede operar de una forma similar a como quien se dedica a comprar criptomonedas o también a venderlas, ya que un usuario que se colocase en corto apostaría a que el precio va a caer o en largo apostaría a que el precio va a subir, pero sin ser poseedor de ellas. Por supuesto las operaciones mediante plataformas de trading online están apalancadas, así que se deben calibrar adecuadamente los riesgos. Además cabe señalar que la legislación que afecta a los brókeres online regulados es distinta a la que afecta a las criptomonedas, que en nuestro país es directamente inexistente.
Las criptomonedas en Colombia
En Colombia no existe una legislación que afecte directamente a este tipo de activos, aunque se han hecho movimientos en esa dirección por parte de las autoridades, ya que estas muestran el natural recelo de los gobiernos de todo el mundo hacia las criptomonedas descentralizadas y anónimas, así que en definitiva se puede decir que en Colombia se puede negociar con criptomonedas pero todo aquel que lo haga lo hará siempre bajo su cuenta y riesgo, algo que parecen aceptar gustosos quienes abrazaron las criptomonedas, ya que precisamente la descentralización y desvinculación de cualquier actor estatal es la propiedad más atractiva de las criptomonedas y no parece que en nuestro país les vaya precisamente mal, ya que según el presidente de la Asociación Colombia Fintech -en declaraciones de comienzos de este mismo año- en nuestro país se negocian unos 70.000 millones de pesos colombianos cada mes, sobre todo en bitcoin, y según Portafolio Colombia es uno de los países de la región donde más se negocia con bitcoin.